El arrestado les dejaba a veces un colchón para dormir por un precio de 100 euros mensuales.
Un ciudadano de 72 años ha sido detenido por la Policía Nacional en la comarca granadina de Alhama por realizar empadronamientos falsos y supuestos contratos de alquiler a ciudadanos de nacionalidad marroquí. El detenido contrataba además a estas personas para que realizaran tareas agrícolas en su finca pagándoles un salario que apenas alcanzaba la mitad del sueldo legalmente establecido, según ha informado la policía en un comunicado. Las jornadas de trabajo eran “amplias y penosas” para estas personas que se encontraban en situación irregular en España, según ha explicado la policía. El arrestado ha llegado a tener empadronados a 30 personas en una misma vivienda, la suya, en la que solo residía él y su esposa.
Los falsos empadronamientos iban acompañados de supuestos contratos de alquiler por los que cobraba hasta 2.000 euros. A ello se suma, según la policía, que en ocasiones sí permitía a alguno de los inmigrantes dormir en su vivienda. En realidad, les dejaba un colchón exclusivamente para que se tumbaran en un anexo de la casa a un precio de 100 euros mensuales.
La policía ha explicado en su comunicado que la acción del detenido servía para que los extranjeros pudieran justificar un domicilio para obtener sus tarjetas de residencia o para reagrupar a alguno de sus familiares a cambio de un beneficio económico.
La detención de este hombre ha tenido lugar en una comarca con una fuerte producción hortofrutícola. En los últimos meses, tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional han desarrollado operaciones contra la explotación de trabajadores. En una de ellas, en junio de este año, los agentes detuvieron a 14 empresarios por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, a otras cinco personas por favorecer la inmigración ilegal y 29 más fueron denunciadas por estancia irregular. Este mismo mes, tres personas más fueron detenidas por delitos similares.