El próximo miércoles 14 de agosto a las 7 de la tarde, desde la puerta del Ayuntamiento dará comienzo la tradicional subida nocturna a la Mesa de Fornes.
La subida a la Mesa de Fornes se trata de una ruta muy asequible para casi todos los públicos, con un recorrido de unos 12 kilómetros y de dificultad media-baja, que permite a los senderistas conocer la pequeña Villa de Fornes y su entorno.
Se partirá de la puerta del ayuntamiento a las 7 de la tarde, y, callejeando por el pueblo llegaremos a la conocida cuesta del Portichuelo, para dejarnos discurrir por el camino hacia los molinos disfrutando de las maravillosas vistas que ofrece el valle de la Vega de Armas y a lo lejos el extremo sureste del pantano de Los Bermejales.
El sendero continuará por el camino que conduce hacia los Chapiteles, durante este trayecto se suele hacer un homenaje en forma de conversación a la memoria de personas que perdieron su vida en aquellas tierras y que ha petrificado su recuerdo en las diversas cruces que hallamos por el camino en forma de diferentes hitos. Así como recordando historias y anécdotas pasadas de tiempos de los Maquis que tuvieron una fuerte presencia en esta zona.
Todo ello acompañados en todo momento por el sinuoso y vibrante recorrido que realiza el agua por el trazado de la acequia, lo cual nos permite acercarnos a esta para hacer un pequeño alto y refrescarse los brazos protegidos por el cañaveral que deja crecer.
Una vez que nos adentramos en el corazón de la Resinera, descubriremos un pintoresco y espectacular rincón en el que divisamos las estructuras de la antigua Fábrica de resinas con los escarpados picos al fondo del Lucero, El Cerro de los Machos, y La Cadena; un poco más cercano a nosotros, a nuestra izquierda, se alza el Talayón. Aquí ya comenzaremos a apreciar los aromas del romero y sonidos del agua junto a pajarillos y diferentes colores de las plantas tan característicos de nuestra sierra.
Al final de este tramo, quizá el que presenta mayor dificultad, en grupo nos ayudaremos para salvar la acequia, y cruzar el río Cebollón para comenzar el ascenso tomando la pista de tierra que sube hasta la singular Mesa de Fornes rodeados de pinares, y protegidos por un espectacular telón de fondo formado por las montañas de Sierra Tejeda y Almijara.
Éstas establecen la línea divisoria entre la provincia de Granada y Málaga en esta área, dejando la costa malagueña al otro lado de sus vertientes. Esta panorámica nos hará experimentar la sensación de inmensidad que ofrece la naturaleza y que tanto amaron los románticos decimonónicos.
En la subida hasta la Mesa nos deleitaremos en nuestro esfuerzo bajo la atenta mirada del águila, la huidiza escapatoria de la culebra de río, o los evocadores vestigios de una antigua calera que hablan de los quehaceres tradicionales de nuestro pasado más inmediato. Junto a un sinfín más de sensaciones que acariciarán nuestro ánimo al igual que la brisa oxigenada de entre los pinos que nos permitirá una libre desconexión del quehacer y la actividad cotidiana en un ambiente súper agradable.
Fotografías de la subida Año 2017
Fotografías de la subida Año 2018
Nota: Texto extraído de la publicación de alhama.com. La redacción y las fotos han sido realizadas por Rita Fernández Moles. El magnífico relato escrito por Rita Fernández ha sido mínimamente modificado en algunas formas verbales para adaptarlo a este año, sería un sacrilegio cambiar una coma.